¿Qué hago si mi hijo(a) quiere ser YouTuber?

Hace pocos días, una madre me escribió angustiada porque su hija le había pedido ayuda para abrir un canal de YouTube. La niña tiene un talento increíble para la danza y quería compartir online sus coreografías y pasos en videos cortos. La madre estaba asustada y sólo pensaba en los problemas que esto podía acarrearle a su hija, pero así como internet tiene riesgos, también abre posibilidades muy interesantes que bien vale la pena descubrir…

Si tu hijos(as) te han manifestado su intención de ser YouTuber, ten presente estas ideas antes de empezar la conversación con ellos y orientar sus intereses:

1) Ideas y objetivos claros: Para diseñar un canal de YouTube se necesita un contenido de calidad para compartir y se debe definir con qué tipo de público se quiere interactuar. Ayuda a tus hijos a definir bien los objetivos que tienen en mente. Pueden responder a la pregunta: ¿Qué quieres lograr con este canal de YouTube? Y para definir su público objetivo pueden preguntarse: ¿Quién te gustaría que viera tus videos? Es importante definir también si sólo se quiere difundir un interés o si bien se desea ganar dinero como parte de los objetivos a lograr.

2) Organiza el tiempo: Tener un canal de YouTube seguramente demandará bastante tiempo, por lo que es importante armar un horario de trabajo donde las horas de preparación estén determinadas y no se reste tiempo para otras actividades que son importantes como las tareas escolares, responsabilidades domésticas, salir con amigos o hacer deportes. Pregúntales: ¿Cuánto tiempo le dedicarás al día/semana a montar tus videos?

3) Condiciones básicas: Para crear un canal de YouTube se necesita una cuenta de Google o Gmail, y eso obliga a tener más de 14 años. Es importante que chequees esto según la legislación de tu país. Para usar una cuenta teniendo menos de esa edad, debe contarse con el consentimiento de los padres. A pesar de tener ya tener esa edad mínima, es importante que sientan la confianza de contarte si han montado su canal de YouTube y que compartan contigo sus intereses.

4) La privacidad es relevante: El canal de YouTube puede configurarse como un canal privado que se comparte con la familia y conocidos o bien dejarlo público. Dejarlo privado puede ser una opción inicial, pero abrirlo al público, tiene pros y contras que se deben analizar bien. Por ejemplo: evaluar si se tiene la capacidad de mediar los comentarios que se reciban o tolerar la frustración que puede implicar a veces que un video no tenga las vistas esperadas, entre otras posibilidades.

5) Ser YouTuber requiere trabajo y perseverancia: Una primera conversación con los hijos será preguntarles, por ejempo, ¿cuál es el objetivo que tienen en mente a lograr con este canal de YouTube? La fama, el reconocimiento y los seguidores suelen tardar en llegar y son consecuencia de muchas horas de trabajo. Esto implica tiempo, dedicación y perseverancia de su parte.

6) Aportar con calidad: Para que las personas sigan el canal de YouTube y realmente le den valor, es necesario publicar contenidos de calidad, aportar con temas de interés y prepararse bien. YouTube pareciera ser una herramienta para ganar dinero fácil, pero esto suele no ser así en la realidad. Puedes crear una tabla con algunos indicadores que te ayuden a analizar los resultados que alcanza cada video. De esta manera, se va desarrollando la capacidad de análisis y trabajo de datos para afinar la toma de decisiones.

7) La creatividad es clave: Tener un canal de YouTube propio puede ser una excelente herramienta para desarrollar la autonomía, potenciar un talento y desarrollar la creatividad. Es importante que les ayudemos a crear contenidos creativos para que realmente sean un aporte a la comunidad virtual y logren así diferenciarse de otras cuentas similares.

8) Respetar las reglas legales: Enseñarles a respetar la legislación vigente en tu país, sobre derechos de autor. Este tema es relevante para que ellos también puedan hacer respetar sus propias creaciones.

9) Respeto ante todo: respetar a los demás y a si mismos será clave para darle valor al canal de YouTube. De esta manera, el foco estará puesto en aportar con contenidos de calidad que serán seguramente muy atractivos a la audiencia dejando de lado el cotilleo o los chismes. Define con ellos(as): ¿Qué haremos con los comentarios negativos que aparezcan? ¿Los eliminamos?¿Los bloqueamos? ¿Dejamos espacio para comentarios?.

10)  Cuidar la autoestima siempre: El armar un canal de video puede ser una manera de valorar el trabajo y talento de nuestros hijos(as) gracias al reconocimiento que reciban de sus usuarios, sin embargo, es importante estar atento a las reacciones que van surgiendo frente a los comentarios que quedan escritos en cada video. Conversar con ellos y enseñarles a valorar cada comentario o crítica será un aprendizaje en la medida que podamos ayudarles a mediar esta experiencia.

Iniciar un canal de YouTube puede ser una aventura familiar de gran interés si se acompaña y supervisa de la manera correcta. Necesitamos aprender antes de iniciarnos en el mundo YouTuber. Para eso, aprende sobre las reglas esenciales que ha propuesto la misma aplicación y aprender las configuraciones básicas para lograr el éxito sin exponerse a riesgos.