El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) tiene un origen prominentemente genético. Su principal característica es que los menores con esta condición, tienen dificultad para concentrarse y controlar sus impulsos.
Sin embargo, a veces vemos niños con TDHA muy concentrados frente a una pantalla. Es probable que esto tenga que ver con la motivación, el tipo de estímulos y recompensas que usan la televisión, las redes sociales y los videojuegos.
La dificultad de los niños con TDAH reside principalmente en su capacidad para concentrar su atención directa de forma sostenida en el tiempo. Esto significa que tienen más problemas que el resto de la población para concentrar su atención en tareas que requieren un esfuerzo mental.
Un estudio publicado por la revista Pediatrics confirma que los niños que pasan más tiempo delante de la pantalla presentan un mayor riesgo de sufrir trastornos de la atención y problemas de memoria. Esto se intensifica en la población que padece TDAH.