Lo que debes saber sobre las fake news

Siempre han existido las noticias falsas. Joseph Goebbels, las definió como “una mentira repetida mil veces que se convierte en verdad”. En Grecia le llamaban “realidades alternativas o postverdad”. Antes de la aparición de las redes sociales las llamábamos “chismes” y quedaban en nuestra comunidad local,  pero hoy toman mayor importancia por la rapidez con que la se comparten en la red.

Un fake news puede ser 100% falsa o contener trazos de verdad, lo que la hace más difícil de definir. A veces incluso,  tomamos por mentiras las opiniones con las que no estamos de acuerdo.

Hacer una noticia falsa es algo relativamente simple, considerando que existen aplicaciones como www.12minutos.com que permiten crear rumores y hacerlas virales en las redes sociales. Es sencillo creer en ellas si te llega referida por alguien que conoces y en quien confías. Un estudio sobre el impacto de las fake news en España, reveló que el 86% de los usuarios de internet, no distingue una noticia falsa de una verdadera. Lo interesante es que el 60% declara que sí lo hace, pero al someterlo a algunas pruebas, el 86% no lo logra. Impresiona además, que el 4% de los encuestados, reconoce haber inventado una noticia falsa y el 50% reconoce haberlas compartido.

Entendemos que las redes sociales ya no son meras plataformas que unen personas, sino que son medios de comunicación; es importante entender cómo funcionan y de qué manera las personas pueden ser víctimas de sus contenidos intencionalmente sesgados o tendenciosos. La información falsa está diseñada para manipular tus emociones, infundir temor y persuadirte  para que la compartas. 

Buena parte de los contenidos digitales que recibimos, no están jerarquizados por su veracidad o impacto en la sociedad, sino, por el algoritmo web que decide por nosotros lo que queremos leer. En la medida que entendemos cómo funcionan el mundo digital, es probable que nuestro pensamiento sea más crítico frente a la información digital que recibimos.  En los 30 segundos que dedicamos a ver una noticia, no logramos una opinión certera ni menos, entendemos si estamos compartiendo algo que puede perjudicar a otros; pero, realmente, no nos importa porque ni si quiera lo pensamos. Te invitamos a darle un nuevo valor a tus likes y a ser más exigente con la calidad de los contenidos que compartes. 

Contra la epidemia de la desinformación, la vacuna está en la educación pero el remedio es el espíritu crítico.

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